Ay amor !! creí haberte hallado oculto en la edad, detrás de las nacientes canas plateadas de mi sien, tras las arrugas nacientes y alguna que otra más profunda de lo que debiera, bajo la piel marchita que un día rebosó de luz y tersura, pero hoy se apaga y pierde su fulgor de antaño trás el velo de los años vividos, la vida pasada , el tiempo sufrido…
Profundas manchas purpureas surcan mis ojos, asoman bajo ellos subrayándolos con un énfasis desmedido… horas de desvelo, pensamientos vanos, desilusiones , desamor…
Creí al fin haberte hallado, oh amor verdadero, tú que permaneces oculto , escondido e invisible para muchos de nosotros que, tristemente nos vamos del mundo sin llegarte a conocer y , aún peor, creyendo erroneamente haberte conocido. Muéstrate tal y como eres! date a conocer y deshazme con tu habitual desazón! , con esa desesperación del que espera y ya no puede soportar el paso del tiempo, fúndete con la lujuria, aliate con el deseo , deja que mis labios saboreen los suyos y que me embriague la pasión con una ceguera absoluta… todo surge , todo queda al descubierto, todo sucede y se imagina , por unos instantes nada importa y todas las cosas vanas desaparecen…
El mundo puede esperar, cielo e infierno aguardan en silencio. El amor desfila triunfante deteniéndolo todo , absolutamente todo, dejándome colgada de un hilo que me une a la realidad, tan sólo un hilo de cordura y razón … oh si se rompiese, oh si se quebrase, si me dejases amor colgando de ti en la eternidad, sumida por siempre en tu sueño, perdida en tu magia y sopor, volando mis manos cuál mariposas revoloteando por todo su cuerpo, ojos cerrados y labios entreabiertos bebiendo pasión, derrochando imaginación , sintiéndolo a él en mi ser como parte de mi , para siempre en mí, siendo uno los dos.
Alianza eterna firmemos, muéstrate siempre a nosotros, antes de marcharnos, antes de extinguirnos y desaparecer en la nada cuál polvo efímero que somos, concédenos sentirte al menos una vez, aunque tan sólo sea una vez , durante nuestro breve paso por ésta senda mortal que hemos de seguir.
He creído hallarte en el otoño de mi vida, siento cosas jamás sentidas , jamás vividas, jamás soñadas… has llamado a mi puerta durante la madurez, antes de que todo caiga por su propio peso, a la mismisima ley de vida has desafiado y aún así sales vencedor ante cualquier afrenta. ¡ Cuán grande es tu poder ! no puede pagarse! no hay oro que te compre ni plata que te perturbe , a tu paso sucumben reyes y princesas, hadas y hechiceras te convocan , más tu apareces a su debido tiempo… a su tiempo… quizá nunca.
S.Tauriz